Un clavo o puntilla es un objeto delgado y alargado, con punta filosa, hecho de un metal duro (por lo general de acero), utilizado para unir dos o más objetos. Un clavo puede ser "clavado" sobre el material a trabajar utilizando un martillo. El martillo, a la vez, es el intermediario que existe entre el clavo y la persona. Entonces, en la acción de clavar encontramos a tres agentes: la mano (hombre: fuerza-movimiento), como el emisor que transmite, por medio del martillo un golpe recibido por el clavo, que es el receptor final que guarda la 'información' entregada. Esto quiere decir que la acción de clavar se esta viendo de un punto de vista de la comunicación.
Cuando nos encontramos en algún espacio (sala de estar de una casa, por ejemplo) y observamos algunos clavos o huellas que fuerion clavados en algún momento, nos emite una información: que en algún momento una persona quiso unir algo (objeto) a esa pared. Si hay muchos clavos o huellas de clavos, sacaríamos la conclusión que, a los habitantes del lugar les gustaba unir objetos a la pared.
Ya que el clavo esta siento un receptor pasivo, he decido que este debe emitir la información.
La información esta siendo emitida por todos estos clavos por dos razones: su cabeza funciona como punto gráfico, los cuales al unirlos forman una imágen; la otra razón, por su misma finción de estar clavados, pero, en un lugar determinado, dependiendo totalmente de la primera razón, formar la imágen. Y será la imágen la que se encargara de transmitir.
Lo que quiere trasmitir es esa acciíon, por la cual considero que, el clavo contiene una información que es emitida por el hombre; la misma acción de clavar: mano --> martillo --> clavo.
Esta acción, hecha casi por milesima vez, formaría una imágen, la cual se determinaría por la cabeza de los clavos que actuán en forma de punto negro, los cuales están determinador por su densidad; mientras más juntos, mas oscuros; más lejanos, más claro.
REFERENTES
No hay comentarios:
Publicar un comentario