Mi proyecto trata de mostrar lo que ocurre con la tinta en los lápices al tener contacto con una cantidad muy grande de papel, cosa que traspase la tinta a través de ellos formando una similitud con las capas tectónicas de la tierra y las capas de papeles entintados.
El objeto consta de 50 papeles tamaño carta (21.59cm por 27.94cm) cortados a su decimosexta parte, lo que logra un total de 800 papeles de aproximadamente 6.9 x
Durante el proceso de elaboración de este trabajo, se puede apreciar que en la parte superior de la torre de papeles, se encuentran -principalmente- dos papeles con una gran cantidad de tinta, lo que les produjo que se retorcieran y su materialidad de ablandara logrando un contraste de elementos en la visualidad de la obra.
Gracias a la perforación hecha en todos los papeles (para evitar que se separasen) se traspasaba la tinta por esa especie de conducto en vez de permeabilizase por los papeles en sí, esto produjo un desnivel de traspaso de la tinta ya que algunos orificios eran mayores y más que otros, por lo que en unas partes solo escurría la tinta hacia abajo como un tubo en vez de dejar su huella en cada papel.
Cada tipo de chorreo descubre su propia superficie, toma su propia forma con ayuda de la gravedad; ya que la tinta está sometida a ella a diferencia de otros materiales con diferentes estados de la materia (sólido, líquido y gaseoso), donde el peso pasa a un segundo plano.
Eso es lo hermoso de trabajar con un elemento líquido, donde uno no es capaz de controlar su trayectoria al 100 % sin dejar que surja algún camino diferente en su viaje al llegar al final.
En mis referentes está Nicolás Lamas, en su obra “Dripping” hecha el 2006, donde presenta un tipo de chorreo pero hecho con esmalte sintético sobre una vara de acero, entre otras.
Cédula:
Valeria Palma
“B&N”, 2009
Sobreposición de papeles y tinta china
6.9 x 5.4 x
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